Para algunos modelos, de lejos parece un cencerro, pero en realidad es un collar con GPS. La Diputación provincial de Guadalajara ha aprobado en la sesión de la Junta de Gobierno celebrada esta semana la resolución provisional de la convocatoria de subvenciones dirigida a explotaciones de ganado vacuno de la provincia para la adquisición de collares con función «vallado virtual» como medida de protección frente ataques de lobo ibérico durante el año 2025.
A la convocatoria, dotada con 400.000 euros, se han presentado un total de 29 solicitudes, de las cuales 18 han sido concedidas y 11 desestimadas por agotamiento del crédito disponible. Las subvenciones se han otorgado en régimen de concurrencia competitiva y cubrirán hasta el 80% del coste de adquisición de cada collar, con un límite máximo de 270 euros por unidad (IVA excluido), ha informado la Diputación en un comunicado.
¿Qué es el «vallado virtual»?
Para que este sistema funcione, cada animal adulto debe llevar un collar correctamente ajustado. Es precisamente el collar el que se encarga de rastrear la ubicación del animal sobre el límite del vallado, con la ayuda del GPS.
El ganadero dispone de una aplicación en su smartphone para delimitar los vallados en el mapa marcado vía satélite y, sobre todo, poder monitorizar los movimientos del ganado.
Gran acogida
El presidente de la Diputación Provincial ha valorado muy positivamente la resolución de esta convocatoria, destacando que «estas ayudas cumplen el compromiso que la Diputación adquirió con los ganaderos y con las asociaciones agrícolas y ganaderas de la provincia, en coordinación con el Gobierno regional».
«Nos comprometimos a poner en marcha una línea de apoyo directo para que los ganaderos pudieran contar con un control más eficaz de todas sus cabezas de ganado y hoy ese compromiso se está cumpliendo», ha dicho.
Además, ha subrayado «la gran acogida» que ha tenido la convocatoria y ha señalado que, gracias a estos 400.000 euros, este año se han podido beneficiar 18 ganaderos.
«El próximo año volveremos a lanzar una nueva convocatoria para completar la instalación de estos dispositivos y llegar a otros profesionales que también los necesitan», ha añadido.
Por último, el presidente ha recalcado que «el objetivo que se persigue es claro: que todo el sector ganadero pueda mejorar la gestión de sus explotaciones y mantener unidas y protegidas sus cabezas de ganado gracias a esta tecnología, reduciendo riesgos y favoreciendo una actividad más segura y sostenible».
CRITERIOS DE VALORACIÓN
Para determinar la puntuación de cada solicitud se han tenido en cuenta diversos criterios. El primero de ellos ha sido la ubicación de la explotación y el número de ataques de lobo registrados en los años 2023 y 2024. Las explotaciones situadas en municipios con más de diez ataques han recibido diez puntos; las ubicadas en municipios con entre cinco y diez ataques han obtenido siete puntos; y las situadas en términos municipales donde se registraron entre uno y cinco ataques han sumado cinco puntos.
También se ha valorado si las explotaciones habían obtenido una resolución favorable de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural por ataques de lobo en 2023 y 2024. En este caso, la puntuación se ha asignado en función de las Unidades de Ganado Mayor (UGM) existentes en la fecha del ataque: diez puntos para explotaciones con menos de veinte UGM, siete puntos para aquellas con entre veinte y cincuenta UGM y cinco puntos para las que superan las cincuenta UGM.
El tercer criterio aplicado ha sido la distancia entre la explotación solicitante y los municipios donde se produjeron ataques en 2023 y 2024. Las explotaciones situadas en municipios en zona de ataques han sumado cinco puntos; aquellas en municipios limítrofes a zona de ataque han recibido cuatro puntos; las ubicadas a menos de 100 kilómetros en línea recta han recibido tres puntos; las situadas entre 100 y 150 kilómetros han sumado dos puntos; y las restantes han obtenido un punto.
En caso de empate, se ha dado prioridad a las explotaciones ubicadas en municipios con menor población y, de persistir la igualdad, al orden de presentación de las solicitudes. Con estos criterios, las solicitudes se han ordenado de mayor a menor puntuación hasta agotar el crédito disponible.
