Como avanzó este miércoles LA CRÓNICA, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, presidía en la noche del 24 de septiembre el acto inaugural de la segunda fase de la iluminación artística del Castillo de Molina de Aragón y Torre de Aragón.
«Es, con diferencia, el monumento mejor iluminado de España, no solo el castillo más grande iluminado, sino que, en términos de la versatilidad de la iluminación, es a mi juicio el mejor», ha celebrado Page, confiado en que será «un imán para atraer turismo».
En este encendido inaugural el jefe del Ejecutivo ha estado acompañado del alcalde de Molina de Aragón, Francisco Javier Montes; el presidente de las Cortes regionales, Pablo Bellido; el vicepresidente Segundo de la Junta, José Manuel Caballero; la consejera de Igualdad, Sara Simón; la delegada de la Junta en Guadalajara, Rosa María García; y el presidente de la Diputación de Guadalajara, José Luis Vega, entre otros.
En otro orden de cosas, el presidente de la Comunidad Autónoma ha dado a conocer que, el próximo 25 de noviembre, Molina de Aragón acogerá el acto institucional con motivo del Día Internacional de la eliminación de la violencia contra las mujeres.
«Creo que merece la pena que algunos que desacreditan estas cosas como actos de folclore, no se escondan», ha señalado, antes de indicar que «una de las funciones de los responsables públicos es crear conciencia» y «orientar e iluminar, como hacen hoy estos focos, qué es lo correcto».
¿Cómo es la nueva iluminación del castillo de Molina?
Ha sido la propia Junta de Comunidades la que ha asumido los 868.358,13 euros que ha costado esta segunda fase de iluminación del conocido monumento de Molina de Aragón.
Para conseguirlo se recorre el perímetro amurallado exterior, lo que permite resaltar la silueta del castillo y sus torres y baluartes.
Se han instalado proyectores en columnas y casamatas, que se activarán únicamente cuando sea necesario, con el fin de minimizar su impacto visual. «En lugar de crear una iluminación uniforme, se ajustarán la orientación y configuración de los proyectores para destacar los detalles arquitectónicos del castillo y suavizar la visibilidad de las áreas más deterioradas de las murallas», se detallaba en el proyecto.
Se usan luminarias lineales de LED en nichos y ventanas «para enfatizar características específicas del edificio», que pueden ajustarse en cuanto a la temperaturas del color resultante.
La misma empresa ya se adjudicó en 2023 la primera fase de la iluminación del castillo, por por 612.387,52 euros.
