Lo viene denunciando en primicia LA CRÓNICA desde primera hora del lunes, una vez comprobado hasta qué punto se había viralizado el contenido grabado por una joven y subido a TikTok.
Las imágenes, éticamente repugnantes, acompañan a un monólogo igualmente difícil de calificar, grabado en la habitación de una anciana en una conocida residencia de ancianos de Azuqueca de Henares.
La residente incluso aparece fugazmente, postrada en la cama donde fallecería horas después, según ha podido saber LA CRÓNICA.
La joven muestra una actitud vejatoria hacia una anciana. «Me da tan mal rollo venir a darle de comer a esta mujer. Parece que sale de una peli de miedo, tía». «Quedarme con ella a solas, es que, me da un chungo. Está más muerta que viva. Me da mucho miedo de esta tía», llega a decir.
La tiktoker es una joven que trabajaba el pasado mes de junio en «La Alameda», del grupo AMAVIR, mes en el que ocurrieron los hechos. Ya ha sido despedida.
Contrariamente a lo que ella pretendía, lo que se ha destacado posteriormente en «X», una de las redes que ha dispersado la noticia con la velocidad y las características propias de un virus, ha sido el uso que hace de la imagen de la anciana.
Quien quiera verlo, puede acceder sin demasiados problemas a un contenido que LA CRÓNICA no quiere ayudar a difundir por lo que tiene de legalmente cuestionable y de moralmente reprochable.
Aunque el contenido de TikTok es del pasado mes de junio, no había trascendido hasta el pasado sábado. Lo constatado es que la empleada está despedida y que la empresa se ha puesto a disposición de los deudos.
Se desconoce si la familia afectada ha decido iniciar acciones legales, pero la Guardia Civil ya tiene ante sí una denuncia formalmente presentada por los responsables de la residencia de ancianos, ante lo que se entiende es una vulneración de derechos fundamentales.
Muy probablemente, la Junta de Comunidades , desde la Delegación en Guadalajara, presente otra denuncia ante la Guardia Civil.
En paralelo, la Consejería de Bienestar Social está ultimando una inspección sobre la residencia, cuyos servicios están conveniados con la Junta de Comunidades.