Auditorio lleno, infinidad de políticos, decenas de premiados… pero quienes han dado el mayor espectáculo desde un principio han sido las botargas de Guadalajara. Incluidos los danzantes de Valdenuño-Fernández, con su paloteo.
De lo «sociopolítico» quedará testimonio en otras informaciones de LA CRÓNICA, pero para darse un homenaje guadalajareño, valgan las siguientes imágenes:








