Víctor Hernández, el torero formado en Guadalajara y al que la afición alcarreña aprecia sobremanera, estaba anunciado para la corrida de toros del 8 de julio en Pamplona. Sin embargo, no hizo el paseíllo. ¿Por qué?
El diestro siguen recuperándose de la cogida ocurrida el pasado mes de junio en Torrejón de Ardoz, que le produjo una muy fuerte conmoción cerebral. Según ha podido conocer este diario, la desaparición de un coágulo ha sido mucho más lenta de lo previsto y se está a la espera de decidir la mejor decisión para el completo restablecimiento del joven matador.
El vídeo que sigue, grabado y facilitado por un lector de LA CRÓNICA, es tan dramático como esclarecedor acerca del percance y del porqué de sus consecuencias:
La Casa de Misericordia lo había incluido en el cartel de los Cebada Gago, que propiciaron un larguísimo encierro por la mañana, siendo sustituido al confirmarse su incomparecencia por Pepe Moral quien, a la postre, sería el triunfador de una tarde compartida con Ferrera y Román.
Hernández llegaba avalado por su gran actuación en su único contrato durante la pasada Feria de San Isidro.

Aquella tarde en Torrejón
Empezaba al natural su faena al último de la tarde cuando fue cogido de muy mala manera Víctor Hernández en el coso de Torrejón de Ardoz, hasta el punto de tener que pasar a la enfermería y no poder continuar la lidia.
La conmoción cerebral es lo que más preocupaba desde el primer momento a los facultativos.
El ejemplar de la ganadería de Domingo Hernández, «Estornino» de nombre, le encunó en el primer pase de la serie, lanzándole contra el suelo para, justo después, acometer de nuevo contra él y levantarlo hasta una altura muy considerable. Las dos caídas fueron realmente bruscas, con las consecuencias antes citadas, que incluyeron no sólo la aguda desorientación sino incluso vómitos en las horas posteriores.
Víctor Hernández compartía cartel con Diego Urdiales y Borja Jiménez.
Anteriormente, ya había sufrido un dolorosa cogida, también con complicada recuperación, nada más abrirse de capa ante su primer en la plaza de Sacedón.
