Este domingo, 2 de noviembre de 2025, Guadalajara y las localidades cercanas han amanecido dentro de una espesa niebla.
La niebla intensa que se da en la Meseta es típicamente una «niebla de radiación» y se forma bajo condiciones específicas, que a menudo coinciden en otoño e invierno:
• Cielos despejados por la noche: Esto permite que el calor acumulado durante el día escape rápidamente al espacio (radiación), enfriando mucho la superficie de la tierra.
• Viento flojo o en calma: La falta de viento hace que la capa de aire frío y húmedo se estanque cerca del suelo.
• Humedad alta: Es necesario que haya suficiente vapor de agua en el ambiente.
• Inversión térmica: Las noches frías provocan que la temperatura del aire cerca del suelo sea más baja que la temperatura del aire a mayor altura. Esta capa fría y densa «atrapa» la humedad condensada, formando la niebla.
Además, Guadalajara se encuentra en una zona interior de la Meseta, a una altitud considerable (unos 700 metros). Esta ubicación es propicia para que se den las inversiones térmicas y las nieblas de radiación mencionadas, ya que son comunes en valles y llanuras interiores que se enfrían rápidamente tras la puesta de sol.
Y aun así, es un fenómeno no demasiado habitual en la capital, aunque sí en esta época del año más al norte, dentro de la provincia.
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