No van a mejorar la circulación de los vehículos privados, en atasco permanente cada día laboral, al comienzo y al final de la jornada. La A-2, pendiente todavía de que algún día se ponga en marcha el tantas veces anunciado carril Bus-VAO, tendrá una mayor atención para los autobuses, al menos en las inmediaciones de Madrid.
Según se acaba de conocer, el Ministerio de Transportes ha licitado por 17,8 millones de euros las obras para dos actuaciones a lo largo de un total de 4,2 kilómetros de la autovía A-2, en el sentido de entrada a Madrid.
El propósito concreto es desdoblar un tramo entre el puente de la calle Guadalajara y la calle Peonias así como delimitar un carril bus entre el Nudo de Eisenhower y el Nudo de San Fernando. Se trata de mejorar la accesibilidad del transporte público entre el enlace de Arturo Soria y el enlace de San Fernando-Coslada y ambas afectarán al tráfico para quienes vayan desde Guadalajara hasta Madrid, en fecha aún por determinar.
El Gobierno aprobó la licitación en Consejo de Ministros a finales de abril. En los últimos años, han sido varios los proyectos consecutivos que se han planteado para reordenar la zona.
La primera actuación, entre los kilómetros 7,800 y 8,650, amplía a dos carriles el tramo trenzado entre el puente de la calle Guadalajara hasta su unión con la calle Peonias. Terminada la obra, el carril derecho será para el tráfico desde en enlace de Canillejas hacia la calle Peonias y el izquierdo, para acceder a la autovía sin interferencias entre los dos flujos de tráfico.

Además, para mejorar el funcionamiento de las líneas de autobuses metropolitanos en esa zona, se aumentará en 150 metros la longitud de la vía de servicio bidireccional en el margen izquierdo de la A-2, entre los kilómetros 8,500 y 8,650, con una glorieta para los giros a la izquierda en la intersección del kilómetro 8.500. Esto conllevará el cambio parcial de los sentidos de las calles Isla de Cuba y Estanislao Gómez y el traslado de una parada de autobús.
La segunda actuación se ubicará entre el Nudo de Eisenhower y el Nudo de San Fernando, entre los kilómetros 11,500 y 14,900, con la delimitación de un carril exclusivo para vehículos de transporte colectivo adosado al tronco de la autovía a lo largo de 2,7 kilómetros, entre el 14,200 y el 11,500. Aseguran que implicará también una mejora de la salida a la M-40.
El nuevo carril bus comportará también reponer calles aledañas y se ampliará el paso inferior del kilómetro 12,750 con una nueva estructura, con un único vano de 26 metros.
