Rafa Guijosa, que marcó toda una época en el balonmano de Guadalajara de máximo nivel durante una dilatada etapa, se encuentra atrapado en Teherán, en plena guerra irano-israelí.
Está en la capital de Irán por su actual contrato como seleccionador del combinado de aquel país, un puesto que ocupaba desde septiembre del 2024 y que ya ejerció a principios de la pasada década.
“Estoy en una situación muy complicada. No tengo buena comunicación, ni WhatsApp ni redes sociales, y la desinformación es total, nadie sabe qué va a pasar. La única forma de salir del país es por carretera vía Turquía (1.300 km), pero me dicen que ahora es muy peligroso”, ha llegado a comunicar Guijosa.
“A Dubái o Qatar por barco es un suicidio. Necesito que se sepa de mi situación a ver si en cuanto se pueda me sacan de aquí vía embajada, Federación de Irán, de Turquía, la española, la IHF, el Barça o la Legión… lo que sea”, reclama.
Rafa Guijosa fue jugador en el Guadalajara, Juventud Alcalá y Barcelona, además de ser uno de los puntales de la selección española.
