No es normal perder 1.000 euros en la calle y, tampoco, recuperarlos. Pero eso es lo que ha ocurrido en Guadalajara.
Los hechos se produjeron en el polígono Industrial ‘El Balconcillo’ de la ciudad de Guadalajara, cuando los agentes en servicio fueron requeridos por un ciudadano que, momentos antes, había localizado una cartera abandonada mientras paseaba por la zona. En su anterior había mil euros. El honrado ciudadano hizo entrega de la cartera y de su contenido a los agentes de una patrulla de la Policía Nacional.
Los policías iniciaron las gestiones para identificar y localizar al propietario, asegurándose de que el dinero y los documentos personales fueran devueltos de forma rápida y segura.
El propietario, que había perdido la cartera accidentalmente, expresó su agradecimiento, tanto al ciudadano, como a los agentes actuantes por la profesionalidad y honradez, ha informado la Policía Nacional en nota de prensa.
En Cabanillas se lo quedaron
Distinto es el desenlace de lo que ocurrió hace unos meses en Cabanillas del Campo, con parecido argumento.
Un vecino de la localidad perdió un sobre con 2.500 euros en billetes de 50 euros en la zona de la calle Benalaque, una de las más transitadas de Cabanillas.
Nadie devolvió tan suculento importe.
Moral y legalidad cuando te encuentras algo en la calle
¿Qué pasa cuando nos encontramos dinero en esas circunstancias? ¿Es legal quedárselo?
Más allá de lo que dicte la conciencia está lo que establece el Código Civil, que en su artículo 615 determina que al encontrar algo, ya sea dinero o un objeto, «se debe restituir a su anterior poseedor».
Concretamente, la ley se refiere a cualquier «cosa mueble, que no sea tesoro» y el dinero en metálico es, precisamente, cosa mueble puesto que se puede transportar. No hay ninguna duda al respecto. Y en cuanto a lo del «tesoro», nuestras normas se refieren con eso exclusivamente a lo que se descubre por casualidad dentro de una propiedad ajena.
Ante un hallazgo, si se desconociera el propietario, habrá que ir a la Comisaría, advertir del caso y dejar el dinero en custodia de los agentes. Y si no hay agentes, al alcalde del pueblo.
A partir de ahí puede ocurrir que aparezca quien lo perdió y pueda acreditarlo (como pasó en septiembre de 2023 en Guadalajara).
A quien lo devolvió le corresponde una recompensa, que acostumbra a ser la décima parte del valor de lo perdido, tanto cuando se trata de un objeto como de dinero en metálico.
Si el propietario no aparece y pasan dos años sin que nadie lo reclame, entonces el objeto o dinero en cuestión pasará a ser propiedad, legítima, de quien se lo encontró en la calle.
Y, además, con la conciencia tranquila y la vertiente legal bien cubierta.
