Lo de montar en globo es uno de los mandamientos que algunos consideran de obligado cumplimiento antes de aspirar al descanso eterno. Para los más inquietos, y capaces al mismo tiempo de permanecer sin demasiada agitación dentro de una barquilla mientras surcas los aires por impulso del viento, lo de volar en globo es una opción. Además, es posible hacerlo en el centro de España, sin demasiadas complicaciones y con la expectativa de grandes vistas a nuestro alcance.
Así, por ejemplo, la empresa Siempre en las Nubes propone un vuelo de una hora, seguido de almuerzo, brindis con cava y reportaje fotográfico y vídeo por 200 euros en Aladinia.com.
Si el lector de LA CRÓNICA prefiere otro emplazamiento fuera de Castilla-La Mancha, pero tampoco muy lejos, la elección más inmediata está en Segovia. A más de 1.000 metros de altitud, la ciudad descansa sobre una gran peña situada entre los valles de los ríos Eresma y Clamores lo que, unido a su cercanía con la Sierra de Guadarrama, provoca que las condiciones atmosféricas para sobrevolarla sean especialmente favorables.
Tras el vuelo aerostático, al aterrizar se celebra un almuerzo campestre con cava, queso y embutidos ibéricos. Lo organiza Aerotours y cuesta 190 euros.
Del mismo modo, sin irnos mucho más lejos, en la Sierra de Guadarrama una buena propuesta conjunta es la de sobrevolar el Parque Regional del Río Guadarrama con The Balloon Company y celebrar la aventura en la Bodega del Nero, en Chinchón. El día empieza por la mañana con el montaje e hinchado del globo. A continuación, hay que subirse a la cesta para un paseo aéreo sobre el río Guadarrama. Cuando el globo aterriza, comida campestre y brindis con cava.
Después, hay que dirigirse al pueblo de Chinchón para visitar la Bodega del Nero, fundada en el año 1870, donde conocer sus procesos de cultivo y elaboración del vino y disfrutar de una cata de dos vinos maridados con queso. La experiencia, a cambio de pagar 395 euros para dos personas.
