En Guadalajara, es noticia relevante que al menos uno de entre el centenar largo de solares que salpican Guadalajara sea aprovechado para su uso natural, que es la construcción de un inmueble.
La historia, no obstante, se remonta años atrás, casi una década. Esta casa levantada bajo el estilo propio del siglo XIX y con distintos propietarios fue demolida en 2016. En sus bajos se asentaban un par de negocios, uno de ellos el local de chucherías que alimentó (literalmente) a cientos de estudiantes del cercano instituto.
A finales de noviembre de 2023, LA CRÓNICA se hacía eco del supuesto final de la espera para un Proyecto de Actuación Edificatoria (PAE) en la ciudad, entre otros muchos intentos fallidos. Aquí, como casi es norma, tampoco estaban de acuerdo todos los afectados con las condiciones planteadas. A partir de ahí, el embrollo administrativo.
Este 9 de septiembre de 2025 vuelve a ser noticia.
A falta de acuerdo, «reparcelación forzosa»
Hace años, en efecto, el Ayuntamiento autorizaba el PAE y las partes implicadas (los distintos propietarios del edificio originario más el promotor ajeno a ellos) debían de ponerse de acuerdo en la compensación a recibir.
Entonces, la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Guadalajara aprobaba el Programa de Actuación Edificadora que afecta a las fincas de los números 7 y 9 de la calle San Gil, en pleno centro de la capital alcarreña.
El visto bueno municipal llegaba ya en 2023 tras resolverse las correspondientes alegaciones presentadas. En consecuencia, se concedía licencia de obra a favor de Desarrollos Majuelo del Cura, S.L., que actuaba como agente edificador.
El proyecto daba cabida a 11 viviendas, de las que 5 eran apartamentos por contar con una superficie útil inferior a 70 metros cuadrados. Son tres plantas y ático, en consonancia con el volumen del edificio previamente existente y de lo que permiten las normas urbanísticas para ese punto concreto de la ciudad.
¿Qué se ha aprobado ahora?
Ahora, la Junta de Gobierno Local en su sesión de este martes ha aprobado el Proyecto de Reparcelación Forzosa en régimen de propiedad horizontal para los solares situados en la calle San Gil, números 7 y 9.
Esta actuación permitirá la construcción del edificio con sus 11 viviendas y garaje. Esto se hará en el marco del Programa de Actuación Edificadora (PAE) adjudicado ya en su día a la misma empresa, Desarrollos Majuelo del Cura S.L.
Desde el Ayuntamiento se destaca que «el objetivo de esta iniciativa es recuperar dos parcelas que llevaban años en situación de abandono, tras la demolición de los antiguos edificios en 2016».
«El proyecto contempla todos los instrumentos técnicos, jurídicos y financieros necesarios para garantizar su ejecución, y se enmarca en la estrategia municipal de revitalización del casco histórico mediante la promoción de vivienda» apostillan enfáticamente desde la Plaza Mayor .
Hay más PAE pendientes en Guadalajara, hasta llegar a la veintena. Es una fórmula que prima la construcción sobre la propiedad. Además, parecía tener sus horas contadas en la misma ciudad que apostó por ello de forma decidida hace tres lustros, cuando aspiraba a convertirse en una referencia para toda Castilla-La Mancha.
De repente, el rumbo puede haber cambiado. O no.