La prostitución es una realidad a veces muy evidente en Guadalajara y otras, no tanto. Además de los intercambios callejeros, que los sigue habiendo, el sentir de la población es que estamos asistiendo a una notoria proliferación de pisos y otros tipos de viviendas adaptadas como prostíbulos, no siempre discretos.
Para aquellas comunidades de vecinos que se ven directamente afectadas por esta actividad, la nueva Ordenanza de Convivencia que está en vías de ser aprobada no será de especial utilidad.
Este lunes, 27 de octubre, en la presentación pública del texto reformado que avanzó en primicia LA CRÓNICA, el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Guadalajara ha sido claro al fijar cuál puede ser la actuación de la Policía Local en el desmantelamiento de estos pisos-prostíbulos: todo tiene que venir precedido por una actuación judicial, sin la cual no hay nada que hacer.
Más aún, Chema Antón ha reconocido que en los últimos tiempos sólo han tenido constancia de tres de estos lupanares en viviendas. Los responsables de uno de ellos accedieron a buscarse otro lugar, un éxito atribuible a la constancia de los vecinos, que denunciaron policial y judicialmente el caso y llegaron hasta el final con ese empeño. Los otros dos se supone que siguen activos.
En cuanto a los negocios que más abiertamente facilitan la prostitución, quizá tengan que ser menos explícitos con sus sugerentes y bastante descomunales carteles si no quieren que se los retiren. Del mismo modo, tampoco deberán aparecer octavillas o tarjetas en los parabrisas de los coches publicitando locales de prostitution.
Al putero pillado negociando, sanción
Así será dentro de unos meses, incluido un nuevo e incrementado cuadro de sanciones para los puteros.
A pregunta de LA CRÓNICA, el concejal Chema Antón ha aclarado que una vez se apruebe la reformada Ordenanza no habrá ningún período de tolerancia ni reconvenciones policiales: «En caso de solicitud de prostitución flagrante en la calle, se sancionará al cliente», ha dicho. Explícitamente, las prostitutas quedan al margen de las multas.
Lo anterior enmienda, aunque sea verbalmente, lo que puede deducirse de la propia norma consultada por este diario, donde se establece que la Policía Local de Guadalajara o los servicios municipales competentes advertirán a los infractores de que dichas prácticas están prohibidas y sólo si persistieran en su actitud se procederá al inicio del correspondiente procedimiento administrativo sancionador «y a toda aquella actuación que legalmente corresponda derivada de la identificación de dichas personas».
Además, si dichas personas se negaran abandonar el lugar, «se tendrá en cuenta esta actitud como agravante para la aplicación de la sanción a aplicar».
A este respecto, resulta fundamental insistir en que se establece de forma clara que «en ningún caso las conductas detalladas podrán estar referidas a las personas en situación de prostitución, a efectos sancionadores».
Multas desde 750 a 3.000 euros
• Se prohíbe la solicitud y negociación de «servicios sexuales y prácticas sexuales retribuidas» en las calles de Guadalajara, bajo multa de hasta 750 euros.
• Aunque se perseguirá lo que ocurra en parques, plazas y calles, se ha añadido un párrafo que debería acabar con toda la prostitución bajo techo en toda Guadalajara, puesto que la prohibición de negociar esos servicios sexuales «también se aplicará a espacios, construcciones, instalaciones y bienes de titularidad privada cuando desde ellos se realicen cualquiera de las conductas o actividades que conforme a la presente ordenanza sean constitutivas de infracción». Las limitaciones en la eficacia de la medida son las expuestas al comienzo de esta información.
• Es un agravante que la «transacción» o la propia realización del acto sexual se haga a menos de 500 metros de distancia de «zonas residenciales, centros educativos o cualquier otro lugar donde se realice actividad comercial o empresarial alguna». En este caso, las sanciones contempladas van de 751 a 1.500 euros.
• La nueva redacción de la ordenanza puntualiza que «se considerará que ha existido pago o retribución, cuando se haya observado el intercambio de dinero y/o especie, cuando así se reconozca por quien ha ofrecido el pago o retribución o cuando se observen otras circunstancias que, a juicio del/la agente de la autoridad, prueben que ha mediado dicha transacción».
• Desde ahora, en Guadalajara se prohíben las conductas que «puedan considerarse como favorecedoras o que promuevan el consumo de prostitución u otras formas de explotación sexual, el mercado prostitucional (sic) y/o el turismo sexual, con independencia de que sean constitutivas de infracción penal conforme a nuestro ordenamiento jurídico«.
«Se considerarán dentro de estas conductas de favorecimiento y promoción las consistentes en aproximar a los clientes a los lugares donde se encuentran las personas en situación de prostitución y cualquier otra conducta que sirva para el acercamiento entre ambas partes» aclara la anónima persona redactora de este apartado. Estas acciones se consideran muy graves y para ellas se reservan las multas más elevadas, desde 1.501 hasta 3.000 euros.
- Del mismo modo, en Guadalajara se prohíbe expresamente «la colocación, reparto, divulgación y/o difusión de publicidad que promueva, favorezca o fomente el consumo de prostitución y la explotación sexual de las mujeres, el mercado prostitucional y el turismo sexual, cuando se utilice para ello:
- El estacionamiento o aparcamiento de vehículo o remolque o cualquier otro elemento, cuya función normal en el espacio público no sea de soporte publicitario.
- La publicidad móvil.
- Cualquier medio audiovisual.
- Folletos, panfletos o cualquier otro formato en papel».
Diferencias entre hombres y mujeres
Hasta ahora, en la introducción de la ordenanza no se hablaba de “actos de explotación sexual”, que ahora sí se citan.
Otro tanto ocurre con la propia definición de la ordenanza, que se proclama como destinada a preservar el espacio público «como lugar de convivencia y civismo, en el que todas las personas puedan desarrollar en libertad sus actividades de libre circulación, ocio, encuentro y recreo, con pleno respeto a la dignidad y a los derechos de los demás y a la pluralidad de expresiones culturales, políticas, y religiosas, así como luchar contra la prostitución y la trata con fines de explotación sexual en la ciudad de Guadalajara«, según se ha añadido.
Al artículo 6º se le ha sumado un cuarto párrafo de enrevesada redacción, en el que el Ayuntamiento se compromete a establecer «los medios necesarios para que la consecución de la igualdad entre mujeres y hombres y la erradicación de la violencia de género se realice respetando tanto la diversidad como las diferencias existentes entre mujeres y hombres».
