Para este miércoles se ha programado un acto de protesta en Guadalajara en favor de la abogada iraní Nasrin Sotoudeh, condenada a 30 años de cárcel y 148 latigazos por defender los derechos de las mujeres en Irán
Las organizaciones convocantes piden que quiera manifestarse lo haga con pañuelos blancos a las siete de la tarde de este miércoles, frente a la Subdelegación del Gobierno.
Convocan el grupo de Amnistía Internacional Guadalajara junto a la Plataforma Feminista de Guadalajara y la Plataforma por la Dignidad en Geriatría. El Colegio de Abogados de Guadalajara ha comunicado también su apoyo a la campaña a favor de la liberación de la abogada iraní, como ya recogió días pasados LA CRÓNICA.
¿Cuál es el origen de esta protesta?
Desde diciembre de 2017, decenas de mujeres han sido agredidas violentamente y detenidas por protestar pacíficamente contra el uso obligatorio del velo en Irán, donde las mujeres y las niñas solo pueden salir de sus hogares con el cabello cubierto por un pañuelo o hijab.
La abogada iraní Nasrin Sotoudeh defiende a las mujeres que se niegan a acatar estas leyes sobre el uso del velo.
Su lucha pacífica le ha valido la sentencia más dura que se recuerde en muchos años contra un defensor o defensora de los derechos humanos: Nasrin ha sido detenida y condenada a 30 años de cárcel y 148 latigazos porque según las autoridades atenta contra la seguridad nacional y constituye un insulto al “Líder Supremo”.
En septiembre de 2010, Nasrin Sotoudeh ya fue condenada a seis años de prisión por los cargos de “difusión de propaganda contra el sistema” y “reunión y colusión para cometer delitos contra la seguridad nacional” por su trabajo de abogada, que incluye la defensa de innumerables casos de presos y presas de conciencia y personas condenadas a muerte por delitos cometidos cuando eran menores de edad. Quedó en libertad en abril de 2013 gracias a un indulto.
Nasrin Sotoudeh ha dedicado su vida a luchar por los derechos humanos en Irán y por ello ha obtenido un reconocimiento internacional, a través de diferentes premios, como el premio Sájarov; pero también ha pagado un precio muy alto por su valentía, pues ya ha pasado tres años en prisión. Su actual detención es el más reciente ejemplo de los intentos de las autoridades iraníes para impedirle desempeñar su importante labor de abogada.
Amnistía Internacional ha manifestado que la detención de Nasrin Sotoudeh es un ataque indignante contra una defensora de los derechos humanos y Philip Luther, director de Investigación y Trabajo de Incidencia para Oriente Medio y Norte de África de Amnistía Internacional ha declarado: “Pedimos a las autoridades iraníes que dejen a Nasrin Sotoudeh en libertad de inmediato y sin condiciones. Cualquier otra medida debe ser condenada sin reservas por la comunidad internacional.”