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30 abril 2024
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Este maniquí del Hospital de Guadalajara puede evitar mucho dolor

Veinte personas asisten en el Hospital de Guadalajara a un taller para la prevención de lesiones por presión en personas inmovilizadas, las terribles escaras, que es como se las conoce habitualmente.

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Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Prevención de Úlceras por Presión, el Hospital Universitario de Guadalajara ha acogido la celebración de un taller para la prevención de este tipo de lesiones que ha contado con una excelente acogida y la participación de una veintena de cuidadores de personas inmovilizadas.

El taller está impulsado por la Comisión de Cuidados de la Piel de la GAI de Guadalajara con el objetivo de formar en el cuidado de personas encamadas o frágiles con riesgo de sufrir lesiones por presión, así como ofrecer recomendaciones para el cuidado de la piel con el fin de prevenir la aparición de úlceras o evitar que se compliquen.

La directora de Enfermería del Área Integrada de Guadalajara, María Isabel Escámez, ha agradecido el interés de las participantes por asistir a este taller y ha puesto el acento en la importancia de evitar la aparición de este tipo de lesiones, “prevenibles en el 95 por ciento de los casos”, que provocan un gran impacto y pérdida de calidad de vida en quienes las padecen, además de resultar potencialmente graves o mortales.

La directora de Enfermería ha agradecido el trabajo que realizan la Comisión de Cuidados de la Piel y la Unidad de Docencia de la GAI de Guadalajara, dentro del objetivo de que el área sanitaria de Guadalajara obtenga la acreditación como Centro Comprometido con la Excelencia en Cuidados (BPSO).

Los mayores riesgos de escaras

Durante el taller se ha ofrecido formación teórica y práctica sobre las zonas con mayor riesgo de presentar úlceras, que son fundamentalmente las zonas de apoyo o prominentes (codos, talones, cabeza, omóplatos, sacro), las zonas con pliegues, humedad o aquellas zonas donde haya existido previamente alguna lesión.

Otro apartado se ha referido a la higiene de la persona inmovilizada y los signos de alarma  que sugieren riesgo de aparición de úlceras. Se han mostrado técnicas para una correcta movilización, cambios posturales o cómo trasladar a la persona de una superficie a otra, además de informar sobre alimentación, la importancia de la hidratación y sobre dispositivos y productos que ayudan a aliviar la presión y mejorar el estado de la piel.

Las enfermeras María Jesús Lanillos, Isabel Rey, Blanca Morales y Marta Gil y la técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería Candelaria González han impartido esta formación de carácter eminentemente práctico. Las personas que han participado han recibido un tríptico con recomendaciones y un diploma de asistencia.


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