José Manuel Latre Rebled – exdiputado regional, expresidente de la Diputación de Guadalajara y exalcalde de Sigüenza– ha estado rodeado hasta hace bien poco de quienes querían, con distintos propósitos, dirigirle la vida, darle consejos más o menos perentorios, apabullarle con vaticinios y marcarle el camino. Al final, la vida tiene sus códigos y marca sus designios, con lo cual termina por suceder lo inevitable. Como ocurre con la muerte.
En el sábado de gloria de los políticos en flor, en ese 15 de junio de 2019 que amanecía con cielos despejados y anuncio de calor, los partidos que lo requerían terminaban de apisonar al rival a golpe de pactos, de vetos y de votos, salvo que la mayoría en las urnas les evitase a los unos hacer el trabajo sucio y a los demás, sufrirlo. Latre no está en esos pensamientos.
A José Manuel Latre, el hermano de Mercedes y Beatriz, le han reprochado su casi inmutable seriedad en Guadalajara tanto como le han recriminado sus ausencias en Sigüenza, camino de la Diputación o de las Cortes de Castilla-La Mancha. Entre el sábado y el domingo estará donde debe estar: velando el cadáver de su padre, en el tanatorio de Caspe.
Cuando enterramos al padre nos quedamos huérfanos, sea cual sea el momento en que esto ocurra. Y vivir la muerte se convierte entonces en una perentoria, acuciante, desesperada necesidad íntima para la que ninguno estamos preparados y que casi todos afrontamos desde la intuición y entre el desgarro. El que diga lo contrario es que aún no lo ha pasado o, si superó de otro modo el trance, lo sería porque tiene el alma hecha de pedernal.
El domingo dan sepultura a José Latre Gavín. La víspera, un alcalde que dejaba de serlo era, frente a ese ataud, tan esencialmente como hay que serlo, simplemente el hijo de aquel hombre, acompañándolo en su momento final por los caminos de este mundo.
Amanecía un día de celebraciones en más de 8.000 ayuntamientos de España, como si la historia comenzara desde cero para esos pueblos o ciudades y para el orbe entero.
El mismo día en que la muerte se ha ofrecido a enseñarnos, una vez más, qué es lo realmente importante en esta vida.
A las 11.30 del domingo, 16 de junio, se oficiará en la Colegiata de Santa María La Mayor de Caspe (Zaragoza) el funeral por José Latre Gavín, fallecido este sábado, a los 93 años. A continuación se procederá a su inhumación, en el cementerio de esa ciudad.