Cáritas en Castilla-La Mancha ha abandonado la Mesa del Tercer Sector a nivel regional, de la que formaba parte junto a otras organizaciones de carácter social como Cruz Roja, la ONCE, la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y Exclusión Social (EAPN-CLM) y el Comité de Representantes de Personas con Discapacidad en la región(CERMI-CLM), por decisión de los propios obispos, que quieren "reflexionar sobre su pertenencia" y quieren hacerlo marcando distancia.
Pese a que Cáritas fue precisamente una de las organizaciones fundadoras del Tercer Sector, fuentes de la citada Mesa han confirmado a Europa Press para LA CRÓNICA que la decisión de esta organización de salirse se debe a que quieren llevar a cabo "un proceso de reflexión más pausado, sereno y serio" sobre su conveniencia de pertenecer a esta entidad mayor, de ámbito regional, teniendo en cuenta la realidad que trata, y parece que han considerado que lo pueden hacer mejor y con mayor objetividad si están fuera de esta Mesa sectorial.
Sorpresa en Madrid
No obstante, fuentes de la propia organización cesante han señalado que Cáritas Española no está de acuerdo con la decisión pero cada autonomía, y por ende, cada obispo de cada diócesis, es "soberano y autónomo" en su toma de decisiones, y este parece ser el caso del Obispado de Toledo.
Y aunque Cáritas está ya fuera, se ha decidido que desde el Tercer Sector se la seguirá informando de las actuaciones que se acometan en todo lo que hace referencia a esta entidad de ámbito regional en la que hoy se engloban más de 300 entidades, en espera de futuras inclusiones.
Desde Cáritas han aceptado el ofrecimiento pero, en cualquier caso, tienen claro que aunque no descartan colaborar con esta Mesa lo harán, de momento, desde fuera, según confirman desde el Tercer Sector.
La decisión de Cáritas, que depende de la Iglesia Católica, ha sido acogida con "todo su respeto" por el presidente de la Mesa Regional, Braulio Carlés, quien, en declaraciones a Europa Press para LA CRÓNICA ha reconocido que le gustaría que volviese a integrarse porque "sería bueno para todos que consideraran volver a entrar" pues cree que tendría "más fuerza" a nivel individual pero también la propia Mesa del Tercer Sector que él preside.
No hay plazos para tomar una decisión pero algunos, que prefieren mantenerse al margen, lo consideran un error pese a que Cáritas sigue vinculada a esta Mesa pero sin sentido de pertenencia.