El bacalao (bacalhau) es el gran conocido, y reconocido incluso por los turistas españoles, de entre los muchos deleites de la gastronomía portuguesa y, más concretamente, la lisboeta. En la capital portuguesa se le conoce como “fiel amigo”. Su pesca se remonta a tiempos medievales, en los fríos mares de los países nórdicos. Tanta es la relación con esta especie, que en 1957 Portugal ya se había convertido en el mayor productor de bacalao salado del mundo.
Para quienes quieran conocer más y se encuentren de viaje en el país vecino, el Centro Interpretativo de la Historia del Bacalao es un lugar de obligado cumplimiento; fácil de ver, además, porque se encuentra en el mismísimo corazón de la ciudad, en el Terreiro do Paço. Las explicaciones, en portugués o inglés.
Este recinto abrió sus puertas en 2022. Cuenta en profundidad la historia de cómo este producto se ha llegado a convertir en un emblema de Lisboa. Estamos ante una exposición que une archivos históricos y tecnología, con proyecciones audiovisuales de viajes y testimonios de los pescadores o elementos de pesca y barcos a gran escala, entre otros muchos.
La Casa dos Bicos y su vínculo con el bacalao
Tanta y tan fructífera es la relación entre Lisboa y el bacalao que algunos de los puntos de interés turístico más relevantes tienen su orígen en este vínculo, como la Casa dos Bicos, tan próxima al museo y universalmente conocida, que era un antiguo depósito de bacalao y ahora es la sede de la Fundación «José Saramago»… en Rua dos Bacalhoeiros, como no podía ser de otro modo. También muy conocida es «Rei do Bacalhau«, la icónica tienda especializada en la venta de bacalao, con más de 60 años de antigüedad.
Más lejos quedan las Salinas de Samouco, al otro lado del Tajo, hacia Alcochete, refugio de miles de aves acuáticas migratorias. Y al alcance de cualquier visitante, los tesoros que el bacalao aporta en la mesa, cuando de comer se trata. Buenos lugares de referencia son los restaurantes D’ Bacalhau y Terra Nova.
Popularmente se dice que existen 1.001 maneras de cocinar el bacalao. La “meia desfeita de bacalhau” es una de las recetas más típicas y consiste en la mezcla del pescado desmenuzado con garbanzos, patatas, cebolla, perejil y ajo. Asimismo, destacan otros platos como bacalhau com natas, una cremosa combinación de bacalao, patatas, nata y bechamel; pataniscas de bacalhau, pescado rebozado; bacalhau cozido, plato estrella en Navidad; y pastéis de bacalhau, unos aperitivos muy comunes y fáciles de encontrar en Lisboa.